Estudiar online con la innovación como aliada

4 de marzo de 2021

noticias_e_identidad-min.png

Marcos Biondo y Belén Casetta optaron por la Universidad Siglo 21 por su paradigma de innovación y educación online desde mucho antes de la pandemia.

La búsqueda de innovación y de actualización constante es una de las insignias más importantes de Siglo 21, a través de un modelo y organización académica, tecnología educativa, infraestructura y servicios pensados para los alumnos desde mucho antes que la pandemia del coronavirus obligara a las instituciones educativas a trasladarse a lo virtual.

En este sentido, son muchas las experiencias de estudiantes que optaron por aprender en la Universidad a través de la tecnología como principal herramienta y hoy cuentan su experiencia. Es el caso de la estudiante de Abogacía y atleta olímpica Belén Casetta y el egresado de la misma carrera, Marcos Biondo, quienes durante su cursada compatibilizaron rutinas deportivas, de trabajo y de otros proyectos en una plena búsqueda por la superación y desde cualquier punto del país.

Para Belén Casetta, la decisión de estudiar en Siglo 21 fue casi inmediata al momento de elegir una universidad que la acompañara en sus necesidades.

“La elegí porque sabía que me iba a permitir estudiar mediada por tecnología y seguir practicando atletismo, al igual que muchos deportistas que competimos y representamos a la Argentina y a través de la Siglo podemos estudiar”, dice.

En su caso, la modalidad de cursada elegida fue Educación Distribuida Home, 100% online y llevando la universidad a todas partes. “Para mí eso es un valor que destaco, porque más allá de la realidad hoy con la pandemia, Siglo 21 brinda la posibilidad de acceder online a la educación utilizando la tecnología para poder estudiar. En mi caso, yo quiero ejercer el Derecho, pero también hacer atletismo y representar a mi país”.

Para la estudiante, el modelo de enseñanza de la Universidad permite que los estudiantes estén permanentemente vinculados a la institución en caso de necesitar ayuda y más allá de las clases: “Puedo consultar mis dudas, hablar con mis compañeros, todo está al alcance cuando lo necesito por más que esté en otro país compitiendo”. Sobre este punto, agrega: “He regresado de viajes y la universidad me ha permitido ponerme al día, recuperar los parciales a los que he faltado o directamente rendir los finales”.

En este aspecto, Belén rescata los beneficios del modelo de enseñanza de Siglo 21 mediado por la tecnología: “Es increíble, es rápido, económico, buscas un material y lo encontrás enseguida, te podés contactar con los docentes, consultar en los foros y estar en permanente comunicación estudiando desde cualquier lado a través del Sistema de Aprendizaje Multimedial”.

Belén recuerda alguno de sus viajes más importantes como atleta y reconoce el acompañamiento de la universidad en los momentos más desafiantes de su carrera deportiva. “He estado en Estados Unidos, Europa, Japón, y me he llevado la computadora a todos lados porque cuando viajo y me muevo la Siglo viaja conmigo. En cualquier momento libre siempre he podido estudiar y tener todo al alcance para hacerlo bien”, dice.

“Siglo 21 me dio la oportunidad de flexibilizar mis horarios”

Marcos Biondo es abogado egresado de Siglo 21, vive en Buenos Aires y también optó por la Universidad debido a la modalidad virtual y a su agenda repleta entre el deporte, trabajo y paternidad.

“La Siglo me permitió flexibilizar mis horarios y utilizar el poco tiempo que tenía entre el trabajo, la familia, el entrenamiento y de exprimirlo y usarlo para estudiar. Fue esa facilidad lo que en su momento me hizo optar por la universidad”, señala hoy. En su caso, al igual que Belén, Marcos realizó sus estudios a través de la Educación Distribuida Home.

“Para mí fue la mejor modalidad y me permitió que mis horarios se acoplaran. En cada tiempo libre, estando con mi hijo, cuando no estaba en casa, entre entrenamiento y entrenamiento”, relata.

Marcos recuerda sus años de estudiante haciendo malabares entre sus obligaciones y responsabilidades y asegura que “se puede estudiar cuando uno se lo propone”.

“En mi caso lo he hecho hasta de camino al trabajo en tren con la tablet, leyendo y haciendo mis apuntes. En su momento fue una forma de aprovechar la distancia del viaje y avanzar con la universidad”.

Para él, la cercanía de los docentes también significó un plus académico importante, además del modelo educativo flexible y adaptado a sus necesidades: “Los profes siempre contestaron muy rápido y me dieron una mano con respuestas inmediatas y concretas. En mi experiencia siempre me ayudaron y de una manera bastante personal, aunque no haya sido cara a cara”.

Mirando hacia atrás, Marcos asegura haber elegido el mejor lugar para formarse dentro de sus posibilidades: “Es una universidad muy moderna que se destaca por sobre otras. A través de la práctica profesional que realicé en la empresa donde ya trabajaba pude cambiarme al sector de legales, para lo que siempre me preparé. Eso para mí fue una gran oportunidad. Es difícil describir la experiencia de haber pasado por Siglo 21, pero puedo decir que aprendí muchísimo de todos y que me nutrió muchísimo”.