“Ser felices y sentir bienestar es una meta personal y nacional”
19 de enero de 2022
Lo afirmó el reconocido psicólogo Martin Seligman, quien recibió el título Doctor Honoris Causa otorgado por Universidad Siglo 21.
El año en que Universidad Siglo 21 sumó la Educación Positiva a su modelo educativo, la alta casa de estudios decidió homenajear al referente de la Psicología Positiva, Martín Seligman, por ser uno de los profesionales más influyentes del mundo y estar entre los diez psicólogos más importantes y citados en la academia.
Desde su hogar en Pennsylvania, Estados Unidos, Seligman participó del 4º Congreso Innova Educa 21 durante el cual recibió la máxima distinción que entrega la Universidad a figuras emblemáticas con prestigio nacional e internacional. “Ser felices y sentir bienestar es una meta personal, nacional alcanzable para Argentina y el planeta”, comenzó diciendo el director del Centro de Psicología Positiva de la Universidad de Pennsylvania.
“Ahora bien, si hace 60 años les hubiera dicho que mayor felicidad y bienestar eran posibles, no me habrían prestado atención, no habría tenido sentido. Eso es porque (Sigmund) Freud y (Arthur) Schopenhauer nos dijeron que lo mejor que podíamos hacer en la vida era no sufrir, no ser infelices. Esa es la doctrina básica del psicoanálisis, muy popular en la Argentina”, explicó.
Sin embargo, adelantó que existe un nuevo horizonte en este Siglo 21 gracias al desarrollo de “la ciencia del bienestar”. Se trata de una ciencia que tiene una teoría del bienestar, que mide el bienestar y tiene la capacidad de incrementar la felicidad de las personas.
“Hace 60 años toda la ciencia se basaba en la infelicidad y cómo aliviarla. No había una teoría del bienestar. Lo único que medíamos era la infelicidad, la depresión, la ansiedad, la esquizofrenia, el alcoholismo y las intervenciones que realizábamos eran paliativas para la infelicidad. Ninguna construía felicidad, pero ahora sí tenemos una ciencia”, continuó. El referente de la Psicología Positiva describió los pilares de la teoría del bienestar, cuyo acrónimo en inglés se dice “PERMA”: la “P” es de emoción Positiva, la “E”, es de Engagement, “R” es de relaciones, “M” de significado y propósito, y “A” es la de alcanzar los logros.
“Estos son los cinco elementos de bienestar y felicidad que liberan a la gente para que dejen de perseguir el sufrimiento. Todos sabemos, que, si tenemos éxito en este mundo, si somos saludables eso produce felicidad, lo que se traduce en un alto nivel de PERMA”, señaló Seligman.
“Lo novedoso de la ciencia es que ser felices tiene consecuencias en la educación”, afirmó. “Los estudiantes que son felices hoy, y tienen un alto nivel de bienestar, van a obtener mejores resultados y logros académicos que aquellos que tienen un nivel bajo de PERMA”, ejemplificó.
Además, ser feliz trae consecuencias en el trabajo y en el deporte, así como permite tener mejor salud física y una vida más larga. Por un lado, “los empleados felices son más productivos, mejores ciudadanos, conservan sus empleos y no faltan tanto al trabajo”, dijo el reconocido psicólogo, y por otra parte, comprobó que los atletas olímpicos y de las grandes ligas “tienen un optimismo elevado y son mejores, particularmente frente a una derrota” mientras que “los que son pesimistas y con un nivel bajo de PERMA”.
“Lo último que ha sucedido en los últimos 30 años es que hay una serie de intervenciones en la psicología positiva que permiten aumentar nuestro PERMA e influir en nuestra felicidad”, clarificó. Para ejemplificar, citó el caso de una persona que escribe tres cosas que salieron bien durante su día y por qué salieron bien, y está comprobado que al cabo de una semana, este sujeto “disminuye su depresión y su nivel de satisfacción aumenta”.
Finalmente, Seligman hizo referencia al Covid y relación con la felicidad y el bienestar. En las mediciones realizadas durante los últimos dos años descubrieron que los jóvenes se han visto más afectados que los adultos, porque están en la etapa de expansión, de búsqueda de un trabajo y de una pareja. “El Covid parece haber interrumpido vuestras vidas, y los jóvenes se han visto más afectados que quienes estamos en una edad de contracción”, sostuvo.
“Durante los primeros meses de la pandemia, la depresión y la ansiedad clínica aumentaron, pero para nuestra sorpresa, a medida que la enfermedad avanzaba, nos encontramos con que la gente era resiliente y que eran pequeños los aumentos de enfermedades mentales y suicidios”, indicó.
Sin embargo, su investigación lo condujo a hallar un efecto mayor que es relevante: “La salud mental tiene que ver con tener un nivel alto de PERMA pero la ausencia de una enfermedad mental no conlleva a la salud mental”. Es decir que “la ausencia de una enfermedad mental con un PERMA bajo es el languidecimiento”. Por languidecimiento hace referencia a “aquellas personas que no están enfermas mentalmente pero que sus emociones positivas son bajas, su compromiso es bajo, sus relaciones no son muy buenas, sus vidas no tienen mucho sentido y no alcanzan sus logros”, explicó.
“Entonces descubrimos que la gente durante el Covid ha pasado de tener un alto nivel de PERMA al languidecimiento. Eso nos enseña que hay que migrar a esas personas que antes florecían, que tenían un PERMA alto, migrarlas del languidecimiento hacia el florecimiento”, sostuvo Seligman.
“Esa debería ser la meta para la educación, para los padres, para el lugar de trabajo, la terapia y el coaching: elevar el PERMA”.
Por último, el reconocido psicólogo y escritor planteó su postura respecto de qué sigue después del COVID. “Hay dos puntos de vista: uno es el pesimista, de que lo que vamos a dar a luz es muy negativo, pero yo tengo un punto de vista diferente, como decía Juliana de Norwich, hace unos 650 años atrás, en medio de la peste negra: No serás molestada, no serás azotada, no estarás afligida, no serás vencida todo irá bien, todo irá bien. Y todas las cosas irán bien”.