Arquea, la empresa de reciclaje de aceite vegetal que hizo historia en Cosquín Rock

Arquea fue fundada hace unos años por Ignacio Paiva, quien comenzó transformando residuos orgánicos en biogás. En 2018, se unió a la empresa Bruno con la idea de crear un prototipo para generar biogás a partir del aceite vegetal usado. Tiempo después el proyecto fue mutando hasta convertirse en lo que es hoy.

Actualmente la iniciativa de Arquea consiste en transformar el aceite vegetal que se utiliza en la cocina de los foodtrucks en biodiesel, un biocombustible que funciona al 100% en motores. Quienes forman parte del emprendimiento ofrecen a los negocios las herramientas necesarias para reciclar su aceite, y luego se encargan de llevar a cabo el proceso de transformación.

“Yo empecé a notar que el aceite no era considerado un residuo legalmente, no hay ninguna ordenanza que lo determine y entonces ahí fue que arranqué a materializar mi proyecto, gestionando con los locales gastronómicos”, reflexionó Bruno al hablar sobre el comienzo del proyecto.

Es el tercer año que trabaja en Cosquín Rock, estuvo en dos ediciones como voluntario y ahora estuvo trabajando de manera privada con su emprendimiento.

“Era algo que venía buscando. Estuve en Oktoberfest en Villa General Belgrano donde reciclamos aproximadamente 400 litros de aceite, después estuvimos en Ají Mercado Gourmet, después en la Nueva Generación y bueno llegué a Cosquín Rock que es un evento muy grande por la cantidad de gente, la infraestructura y lo que genera”, destacó Bruno.

En cuanto a su labor particular en esta edición contó que le dio todas las herramientas a los puestos gastronómicos, los asesoró y trabajó en conjunto con el área de sustentabilidad de Cosquín Rock. Luego de detallar su trabajo, afirmó “ Fue un éxito la gestión porque reciclamos 700 litros de aceite y generamos un gran impacto positivo”.

Para dimensionar lo que se genera con estas acciones basta calcular que un litro de aceite puede contaminar hasta mil litros de agua. De esa manera se evitó la contaminación de 700 mil litros de agua, justamente en Santa María de Punilla donde hay diferentes cursos de agua,

Otra cuestión importante y que magnifica aún más el trabajo realizado es la medición de la huella de carbono, donde se analizó lo que generan 700 litros de biodiesel y el impacto que tendría el combustible común. Entonces se evitó que se emitieran dos toneladas de dióxido de carbono en la atmósfera.

Como Universidad promovemos que estudiantes y egresadas/os, a través del contenido de las currículas y la posibilidad de participar en diferentes espacios, puedan desarrollar la capacidad de crear soluciones disruptivas, detectar las necesidades puntuales que tiene la población y abordarlos de una manera integral y con una mirada sustentable.