Diplomatura en Gestión Integral y Liderazgo de Cambios Organizacionales

En la actualidad, hablar de cambio, es hablar de transformar un estado en otro, de adquirir algo que no se tenía, de modificar condiciones sociales, de relación, con la tecnología, etc. Decir que algo cambió, implica aceptar que hay vida.

Generar y/o autogenerarse un cambio, tiene tantas connotaciones positivas como negativas. Es una palabra polisémica, capaz de adaptarse a los tiempos volátiles e inciertos que la humanidad está causando y enfrentando. Desde la mirada del modelo RUNA, hay un enfoque en el cambio de las personas y de las organizaciones que solo sucede cuando hay una transformación de la ACCIÓN: transformando las maneras de definir límites, de lo posible, de los modos de vincularnos, del acceso y uso de la información, entre otras cosas.

Gestionar cambios, implica entonces impulsar una manera organizada e integrada de coordinar las acciones necesarias para que las personas y, por ende, la organización, adopte las transformaciones propuestas.

Para llevar adelante la gestión de cambios, resulta fundamental contar con un modelo metodológico que se adecue a la realidad y al contexto actual; que facilitan la acción coordinada, es decir, que cuenta con fines prácticos y adaptables a cualquier realidad.

La habilidad para llevar adelante esta función implica desarrollar una metacompetencia. ¿Por qué meta? Porque abarca un conjunto de competencias diversas que ponen en juego los y las gestoras de cambio al momento de acompañar los proyectos de transformación.

Esta propuesta de aprendizaje busca proveer de herramientas y contenidos y generar espacios de entrenamiento para que el desarrollo de este conjunto diverso de habilidades sea posible.