En la previa a un nuevo desafío deportivo, Tomás Albornoz, Santiago Carreras, Juan Martín González y Juan Cruz Mallía, integrantes de Los Pumas, compartieron con estudiantes y la comunidad universitaria una charla que fue mucho más que rugby. Bajo el título “Más allá del juego” hablaron de sueños, decisiones, resiliencia y de cómo la educación se convierte en un aliado fundamental dentro y fuera de la cancha.
Un puente entre la educación y el alto rendimiento
Universidad Siglo 21, sponsor oficial de la Unión Argentina de Rugby (UAR), impulsa junto a la unión un convenio que otorga 100 becas de pregrado y grado a deportistas de alto rendimiento. Un acuerdo que, en palabras de la institución, busca “acompañar la pasión con formación”, ofreciendo la flexibilidad y las herramientas necesarias para que cada jugador pueda desarrollarse en su carrera deportiva y académica.
Este compromiso se enmarca en el modelo de Educación Positiva, que promueve no solo competencias académicas, sino también fortalezas personales y bienestar, para formar personas íntegras capaces de liderar dentro y fuera del deporte.
La constancia como motor
Los cuatro deportistas coincidieron en que la disciplina que los llevó a vestir la camiseta de Los Pumas es la misma que los impulsa a seguir estudiando.
Decidir con propósito
Cada uno contó su recorrido académico y cómo fueron encontrando carreras que los motivaran: desde Abogacía y Contador Público hasta Licenciaturas en Recursos Humanos, Administración de Empresas y Comercio Internacional. Algunos descubrieron su verdadera vocación después de probar distintas opciones, destacando que no hay que tener miedo a cambiar de rumbo para seguir lo que realmente apasiona.
Caer, levantarse y seguir
Para los jugadores, tanto en el deporte como en la vida académica, las derrotas y obstáculos son parte del camino, lo importante es levantarse con más fuerza.
Un mensaje para quienes sueñan en grande
El cierre fue un llamado a la perseverancia, la pasión y el disfrute:
La tarde terminó con una certeza: el verdadero triunfo no se mide solo en el marcador final, sino en la capacidad de construir un camino con esfuerzo, aprendizaje y propósito.
